Las historias vuelan. Muchas de ellas de talle alto, con 10 alas oblicuas y 9 entaconadas. Ejemplo de esto, la del chino que facha rufa,que nunca para de vivir
historias con gloria.

Pasados los años, aquella isla Paradisiaca, vecina y amiga de la “Costa de Aragua
apretada en 3”, se convirtió con risas sin prisas en un ejemplo de referencia mundial.

Resulta que durante una de esas noches adornadas y saboreada de estrellas doncellas, el crew del chino vio a lo lejos una embarcación moderna y extensa que navegaba vagamente hacia el archipiélago "Sunny Funny Caribean Trippy Blue Space" y al cabo de unas horas, este objeto algo invasivo e insisivo se amarró a unos de los cabos de la isla festiva.

Vestida con atuendo de lujo y haciendo gala de una sonrisa brillante e imnnotizante,desciende la ultima amante del gran Amilcar viajante, llamada Diana Diamante.

En su mano tenia una tarjeta de invitación del continente, quienes estaban curiosos por conocer y entender la procedencia y sabiduría de esta gente.

El chino que facha rufa, junto a su equipo ilustre de soñadoras-cantoras, fueron invitados por D.D a navegar por aquellos cielos de paraísos perdidos,tajantemente extendidos y divididos en auténticas realidades, donde la lucha intensa es a diaria y no estacionaria.

Por casualidades y manualidades de la vida , Lupe, Carmen, Flaminia, Petra, María Inés del Avant-Garde, Coromoto, mi segundo nombre, y Valentina-Risa-Hermosa-Rosa, estaban justamente dedicadas al estudio sociológico estrambótico de su propia cultura alborótica.

El estudio fue relajado, amortiguado y programado por la productora exclusiva de la radio parlante 1 2 3. Para facilitarlo todo, Flaminia entre tanta energía de años de antaño creo algo parecido a lo que hoy conocemos como el T.D.H.D.Y. de gran tamaño: Tabletas De Historietas Discretas Y Directas.

Simplemente el "touch" era el caracol, mientras que el "screen" eran 35 pulgadas de corazonadas de arena-morena y de uso muy fácil. Para borrar, simplemente dependían de las olas, de su grandiosa fidelidad, y su memorable te quiero....
Mientras tanto, entre birritas, sonrisas y caricias delicias, el Chino y Lupe, vestidos como siempre de anhelo caramelo valoraban desde lejos, perplejos, y sin la ayuda de ningún espejo, el trabajo que juntos habían hecho los dos por años. Ellos tenían la respuesta de la admiracion del curioso continente, el porque de su eterna alegría y el porque de su exquisita sangría.

Recordando el primer estatuto de la isla del chino que facha rufa: reír y dejar reír resumía la aventura ideológica de esta realidad contada, construida y recientemente explorada. Era isleña, profundamente caribeña y costeña, tostada por la complicidad reciproca de los caracoles morados y del "be happy aquí" enamorado.

Las niñas de todos los colores descubrieron las respuestas ,así que voltearon, se miraron, saltaron y victoriaron las conclusiones inmediatas del estudio lógico-sociológico, emprendido por algo más de un diminuto minuto antológico y analógico.

Como pruebas de las conclusiones acertadas, bastaba enfocar los rostros de la población cercana, respetando y aplicando con gusto gastronómico, la única pero importante ley de esta historia: ser feliz y contribuir de manera conciente con la alegría incandescente de las mentes presentes, teniendo claro hoy y siempre que todos somos
cómplices de esta historia fluorescente.

En este sentido, aceptaron la invitacion de la primera huésped de la isla. Decidieron viajar, volar, contemplar y enseñar a esos territorios perdidos con una única exposición, canción e ilusión, el cual era dejar a media “cosa redonda” convencida de que todo lo que había sucedido bajo las sombras de las palmeras cantantes, había sido producto de corazones sonantes, y demostrar que esta historia aún incompleta se viste a diario
de sentimientos repletos, de ilusiones contentas y de sonrisas intensas......

Macérece, imprímase, grábese y divúlguese.......
Todos somos cómplices de esta historia.....